"Un amor sin etiquetas" Ni amigos, ni novios, ni extraños, ni conocidos, solo dos personas que se quieren sin saberlo.
POR C.A
28 May, 2018
Tiempo de lectura aprox. :
11 min.
+14 votos
No, no necesito que me digas que me quieres, eso lo sé, tampoco necesito que me digas que lo lamentas, en sí, entre nosotros el aspecto de las palabras no era algo que necesitáramos para entendernos y para estar juntos, aunque para serte muy honesta, no sé ni qué somos ni hacia dónde nos llevará la corriente de nuestro tormentoso amor, porque de lo único que estoy segura es de que nos queremos, pero creo necesario hacer un recuento de nuestra historia, un recuento, que lo creo necesario porque necesito sacar todo esto que siento, ese nudo de emociones que se encuentra en mi garganta, ese mundo de posibilidades que tengo en mi cabeza en el que sueño a cada momento en el que estaremos juntos, esa nostalgia de todo lo que hemos vivido y esa agonía que me causa nuestra profunda cobardía al no luchar por nosotros, que en todo caso es tuya, porque yo siempre, consciente o no, he estado esperando por nosotros.
Espero que al escribir todo lo que hemos vivido, pueda encontrar la falla que tuvo nuestro amor o al menos tener estos recuerdos apasionados de nosotros, y es que muchas veces dicen que en las películas románticas siempre sabemos el final, pero lo que importa es el durante, el cómo sucedió el enamoramiento. Aquí también ya sé cuál será el final, pero sé, aunque duela, que no será uno feliz, que no terminaremos juntos y que lo más seguro es que acabemos destruidos, heridos y marcados por un amor profundo y real, pero como toda buena historia, lo que importa es el cómo, así que aquí vamos, ah por cierto, casi lo olvido, espero que algún día leas esto y recuerdes nuestra historia, un día en el que no sea tan cobarde, un día en el que ya ame a alguien más, un día en el que ya no duelas, un día en el que ya no habites en mí.
Un agosto del 2016 entré a la universidad llena de ilusiones en cuanto a mi carrera, con un poco de miedo por la elección que había realizado y con esperanzas de salir adelante, pero una de las cosas que más quería era conocer el amor, el verdadero del que todo el mundo hablaba, ese que te marcaba para siempre, ese que te hacía dejar todo y luchar a muerte .
Qué estúpida era, ojalá hubiera sabido todo lo que me esperaba, todo lo que sufriría contigo, pero más que nada todo lo que aprendería.
Fue en el mes de octubre, estaba con una amiga y me enseñó la foto de ella con un chico y más personas, "este es el chico que me gusta" yo al ver la foto le dije que estaba horrible, en fin al minuto me invitó a una fiesta a la que fui, pero no conocía a nadie, mi amiga que me había invitado no estaba y yo me encontraba sumamente asustada, en esos momentos me encontré con un amigo con el que estuve durante la fiesta y fuimos a una mesa a jugar beer pong, yo no tomaba, así que los observé mientras jugaban y ahí estaba el chico de la fotografía de mi amiga, tan arrogante como lo había imaginado, pero en persona era sumamente atractivo y me sentí idiota por ello, en fin "un player extranjero que siente que nadie lo merece" me dije para mis adentros, lo miré fijamente con curiosidad y el me miró como si no existiera, estaba borrachísimo, en fin me fui de la fiesta con mi amigo y me dormí, sin saber que algo en mi vida ya estaba cambiando y ni si quiera lo había notado.
En esa misma semana hice un nuevo amigo en la escuela, quien con el tiempo se convirtió en un hermano para mí, cada que lo veía lo saludaba y cual fue mi sorpresa al ver que estaba con ese desagradable sujeto de la fiesta. Obviamente lo súper ignoré y sólo saludé a mi amigo, o sea era el colmo tener que estar aguantando comentarios entre mis amigas de lo atractivo que era, de lo mágico que sonaba su voz y del crush que tenían con él, no lo soportaba, así que cuando me enteré que era el mejor amigo de mi mejor amigo, en serio pensé que se trataba de un mal chiste y decidí darle la vuelta al asunto para no darle importancia a su presencia, él podría ser el galán de la escuela, pero no tendría mi atención como el resto de las chicas.
Un día fui a una fiesta en la que estaba dispuesta a conquistar a un chico que me había robado el corazón, ese día me fui súper diva dispuesta a robarme la atención de todos, pero no me salió bien, porque él nunca llegó, ese día tuve en medio de todo una pelea con mi mejor amiga, la relación ya estaba súper dañada y llena de problemas, era cuestión de tiempo para que se fuera al carajo y ni si quiera podía hacer nada, así que me senté mientras todos bailaban, se emborrachaban y se comían como si no hubiera mañana y en medio de esa multitud lo ví, ese día entendí que al parecer me lo iba a estar encontrando hasta en la sopa, y lo ví tan atractivo que me dí pena, realmente era guapo, se estaba besando con una chica y me dio gracia las ironías de la vida, todos parecían estar tan bien y yo me reproché el haber ido a esa fiesta del carajo tratando de encajar en un mundo en el que claramente no pertenecía y vestida tratando de aparentar una chica que no era con personas a las cuales no les importaba.
El tiempo pasaba y yo seguía procurando a mi mejor amigo y por ende al idiota ese, pero a él lo ignoraba a niveles que nunca había usado con alguien, y cuando teníamos una conversación de más de dos palabras yo la mataba con alguna frase sarcástica hiriente y me iba. Recuerdo que un día llegué un domingo a la escuela a terminar un ensayo sobre el feminismo que planteaba Simone de Beauvior para la clase de una maestra que estaba obsesionada con el tema del feminismo y la verdad es que no me encantaba del todo que una clase de diseño se enfocara sólo en ello, pero en fin, qué podía hacer. Mientras hacía mi ensayo de 6 cuartillas en una computadora, llegaron él y mi amigo, después de casi un mes, formalmente me preguntó mi nombre y se presentó conmigo, me preguntó sobre mi proyecto y ambos tuvimos una platica muy amena e interesante sobre dicho tema, todo me pareció muy extraño, había sido sumamente grosera y cortante con él y para sorpresa mía, a él no le había molestado en ninguna manera.
El tiempo que transcurrió después nuestra cordialidad avanzó al punto de que nos saludábamos si nos encontrábamos y sosteníamos una pequeña charla si era necesario, pero nada especial a decir verdad y no era como que me importaba, sólo estaba ahí, pero con lo poco que lo había conocido mi percepción hacia él no había cambiado mucho, sino que al contrario se había reafirmado, un mujeriego en potencia y yo estaba decidida en el aspecto en que no iba a caer en su juego. En una ocasión me pidió ayuda con una tarea y le di algunos tips sobre un debate que tendría sobre religión, él me dijo que si le mandaba la info por correo y yo le dije que mejor se la pasaba por Facebook y se la mandé en un mensaje, él me miró y me dijo "¿desde cuándo te tengo agregada?" y le respondí "fue un día tan memorable que lo anote en mi diario, pero no lo recuerdo" ashhh o sea más engreído no podía ser, pero en el fondo me gustaba que fuera taaan idiota, porque así podía sacar mis frases sarcásticas más filosas sin sentirme tan mal.
Durante el resto del tiempo yo lo veía siempre con alguna chica o con varias, mientras que yo seguía sufriendo al chico del que me había enamorado y lo que comenzó como un completo desastre, con muy poco tiempo se fue forjando como una amistad muy divertida con él y mi mejor amigo. Si pudiera elegir y congelar el tiempo, me quedaría con esos momentos, con esas primeras veces, con toda la inocencia y la expectativa de todo lo que iría pasando, con esos pequeños momentos en los que ya se había robado mi corazón, pero que ni me había dado cuenta. Dicen que lo que mal empieza, mal termina, la verdad es que tengo mis dudas sobre esa frase porque creo que todos tenemos el poder de enmendar nuestros errores, de hacer funcionar las cosas cuando realmente queremos, pero ¿qué pasa cuando nos dejamos llevar por el miedo?, ¿qué pasa cuando nuestro orgullo puede más?, ¿qué pasa cuando sabemos lo que queremos, pero no estamos dispuestos a pagar el precio?, ¿qué haces con los insomnios que te reclaman el no haber sido lo suficientemente valiente?, ¿qué haces cuando la razón y la dignidad te piden que dejes de insistir, pero tu corazón agoniza por otra oportunidad?, ¿qué haces cuando tu moral está en contra de lo que sientes?, ¿hasta dónde estarías dispuesto a luchar por alguien que te quiere, pero que no se ha dado cuenta?

La verdad es que la respuesta a todas las preguntas planteadas es un no lo sé, porque esta historia apenas está comenzando, porque a pesar de todo el daño que me ha hecho, de todo el dolor, aún tengo la esperanza de ser la excepción a esa regla, a todo, porque en fin, creo que todos se pueden ir al carajo con el hecho de que si son compatibles o no en carácter, en gustos, en pasiones...bullshit, no importa nada de eso, lo más importante era que se amaran como locos, como nadie, que no pudieran estar separados sin estar pensando en cómo estaría esa persona que amas y que te importa, que sin importar todos los errores que ambos cometieran, se buscaran para solucionar las cosas, para pedirse perdón, que sin importar las peleas, las diferencias y los arranques de ira, al final del día, sin saber cómo o por qué, regresaran a estar juntos con más amor que nunca, dejando el pasado atrás y cada vez más convencidos de lo que sienten. Pero no, para mi desgracia y para la fortuna de otros, el querer a alguien a veces no era suficiente, al menos no para tener una historia de ensueño y llena de color rosa como las de todos los que se esforzaban en aparentar una relación superficial en Instagram. No, nuestro cariño no era para nada convencional y como completos rebeldes, rompía con todas las reglas establecidas, lo nuestro no podía ser encasillado en ninguna categoría, porque nosotros éramos mucho, mucho, mucho más que amigos, que novios, que free's, que conocidos, porque a veces lo éramos todo al mismo tiempo y a veces ni extraños cordiales. Nuestro cariño no daba para algo convencional, formal y establecido, no, para eso nuestro cariño no bastaba, sin embargo nuestro amor sí bastó para seguirnos buscando a pesar de todas nuestras diferencias, de todos nuestros problemas, nuestro amor bastó para regresar en todas las veces que nos alejamos creyendo que sería la última vez que estaríamos juntos, bastó para luchar por nuestra amistad en contra de todas las personas que nos querían ver separados, bastó para perdonarnos por todo el daño que nos provocamos, bastó para perder nuestro orgullo y para querer luchar por un "nosotros" dañado, roto, herido, lastimado e irremediable para muchos, incluso para mí, aunque duela aceptarlo. Te quiero demasiado y ni si quiera sé desde qué momento, pero lo cierto es que desde que te conocí el destino conspiró para que siguiéramos estando juntos, aunque no de la manera en que hubiéramos querido. Es por esta razón que deseo con todo mi corazón poder lograr ser la excepción a todo, incluso de nosotros mismos, ojalá con querernos sí fuera suficiente.

Continuará, chicos estaré subiendo toda mi historia de 2 años desde el 2016 hasta ahora, espero que me acompañen hasta el desenlace que hasta el momento ni yo sé cuál será...
5.8K visitas
Valora la calidad de esta publicación
0 votos

Por favor, entra o regístrate para responder a esta publicación.

Laura16 497 puntos 28 May, 2018 Laura16 497 puntos
Me ha encantado! Escribes súper bien y me he enganchado a esta historia! Quiero seguir leyendo más cosas
+2 votos
28 May, 2018
C.A 28 puntos 28 May, 2018 C.A 28 puntos
Muchas gracias Laura16, espero que te siga gustando.

Bonito día.
Joseriichart 467 puntos 28 May, 2018 Joseriichart 467 puntos
Un articulo muy trabajado, felicidades
+2 votos
28 May, 2018
C.A 28 puntos 28 May, 2018 C.A 28 puntos
Muchas gracias Joseriichart (:, bonito día
Publicaciones relacionadas
Adimvi es mejor en su app para Android e IOS.