En un mundo cada vez más interconectado, no hay lugar para esconderse de la verdad. Sin embargo, a menudo me encuentro con personas que eligen vivir en una negación constante, creando su propia realidad alternativa .
La incomodidad es una reacción natural a la confrontación con la verdad, especialmente cuando esa verdad desafía nuestras creencias y percepciones. Pero, ¿qué sucede cuando la verdad se omite intencionalmente? ¿No es la omisión también una forma de mentira?