El único lugar en dónde nadie te juzga...
19 Feb, 2022
Tiempo de lectura aprox. :
6 min.
+1 voto




En algún momento en particular nos hemos sentido rechazados, quizás en un grupo no encajamos, queremos ser amigo de alguien y no le caemos bien, nos gusta alguien, pero no siente lo mismo, tal vez hasta con los padres se presenta el caso que tomamos una decisión y no les agrada. Realmente es agobiante vivir con ese temor, en las que existen ocasiones donde no podemos dar nuestra opinión, o no podemos realizar cierta tarea, o también no acercarnos a un lugar con tal de evitar una situación amenazante. 

Las personas tendemos a subestimar a otras por su aspecto físico, por la vestimenta que usa, su situación económica, ideología política, nacionalidad, por tener pensamientos distintos, etc .

Existe una persona extraordinaria que no se fija en todas estas cosas, Jesús no hace acepción de persona y lo dice en la biblia en Hechos 10:34 Entonces Pedro, dijo: Ciertamente ahora entiendo que Dios no hace acepción de personas. 

En nuestra vida siempre habrá alguien que no esté de acuerdo con nosotros, pero verdaderamente es mucho mejor sentir la aprobación de Dios, que cualquier otra persona en el mundo, porque hay que decir la verdad, incluso hasta nuestros padres, nuestra familia puede que nos rechace, que no esté de acuerdo con nosotros. Y esto ocurre porque lamentablemente nuestra naturaleza humana y corrompida nos lleva a comportarnos de esa manera. En cambio Dios piensa de otra forma, él ve más allá que cualquier persona, porque nos basamos en el orgullo, en el prejuicio, y él se basa en el amor y la comprensión. Desde el principio deseó el bienestar del ser humano, por eso envió a su Hijo Jesús a rescatarnos por los errores que hemos cometido, para salvarnos de esa manera egoísta de vivir, y que podamos vincularnos con él. 

Considero que es una buena opción tener en cuenta a Jesús, de dar lugar a que forme parte de nuestras vidas y caminemos hacia el rumbo que le gustaría, porque estableció sus principios para que podamos vivir de una forma distinta, de un modo que le agrada, que hace bien a nuestro espíritu. 

Cuando nos acercamos y caminamos junto a Jesús, si somos sinceros y exponemos nuestros temores, nuestros defectos, nuestras heridas, y le damos la libertad de que se haga cargo de ello, a medida que pasa el tiempo nos va ayudando a superar esos temores, cambiando nuestra mala manera de pensar que nos lleva a accionar de forma errada y egoísta por una forma mejor, generando y desarrollando ese amor genuino y sincero que solo puede venir de alguien como Dios, que nos ayuda a amarnos con las virtudes y defectos que podamos tener, y amar a los demás sin importar en qué condición se encuentren, sin importar si son muy distintos a nosotros. Y por último sanar aquellas heridas internas que no podemos lograr curar por nuestra cuenta. 

Sin embargo, querido lector, querida lectora, debo advertirte que la única forma de que todo lo que te vengo diciendo funcione en tu vida, es creyendo, creer en lo que un día hizo por vos y por mi al morir en esa cruz, trayendo salvación y sanidad, creer en que puede realizar un cambio en tu corazón y en tu vida. Sinceramente una vez que permitimos conocerlo y hacerlo parte de nosotros, todo cambia. Cuando estableces una relación estrecha con Dios lo que más te importa es su aprobación y la de nadie más. 

Para finalizar solo  quería decirte que mi intención fue presentar un punto de vista distinto a lo habitual con respecto a este tema. Espero pueda serte de ayuda lo que te he compartido. Saludos. 





85 visitas
Valora la calidad de esta publicación
0 votos

Por favor, entra o regístrate para responder a esta publicación.

Adimvi es mejor en su app para Android e IOS.