Me gustan las noches en las que somos siluetas y te busco con mis manos. Las noches en que junto tu cuerpo al mío, mientras el tiempo sucede rápido y no quiero irme .
Mientras la luz del día se apaga, nos buscamos como un animal busca resguardo. Pero esa luz vuelve de nuevo, de la misma manera en que vuelve nuestro estúpido empeño por reprocharnos.Es como si nos volviéramos lobo bajo la luna, y nos atacáramos indomables. Es la luz, que deja entrever a cada arañazo. Y en la noche, solo somos siluetas, que buscan la cura, por necesidad.Necesidad de sobrevivir juntos una vez más.Es el recordarte, frágil, ante mí, con tu sombra desnuda, como desnuda tu alma, lo que me debilita.Por favor, no me hieras, mi corazón te grita.Que no tengo más fuerzas para enfrentarme a ti, aunque después, aun así, de ti, no me quiera ir.No quiero quererte como quien más te quiere y temer que regrese a nosotros la duda, el celo, la suspicacia incansable.Solo quiéreme como tú sabes hacer.