La especie humana es de las pocas que tienen sexo durante todo el año y sin períodos de celo y existe otro primate, el bonobo (Pan Paniscus) que liga el sexo mas que a la reproducción, al estrechamiento de vínculos sociales. En general, los períodos de celo en casi todas las especies animales han de ser cortos y ello por una sencilla razón, porque durante esa época son más vulnerables que en ninguna otra tanto al ataque de los depredadores como de los propios competidores.
En la hembra humana, la receptividad sexual no está condicionada a los períodos de ovulación, es permanente. Tal vez la clave del fenómeno se asiente en la socialidad de la especie. .
En ese contexto, la única especie que practica el sexo cara a cara es la nuestra, algo que explica fenómenos tales como el sueño postcoital, necesario para que no se produzca la pérdida de espermatozoides en el útero, la inusual prolongación del pene masculino que permitiría el sexo frontal, a diferencia de los restantes primates, así como los abultados pechos de la mujer, como imitación de las nalgas, así como el acusado dimorfismo sexual en nuestra especie.
OPINIONES:
* La hipersexualidad es el aumento repentino o la frecuencia extrema en la libido o en la actividad sexual.
Que los hay, los hay pero no tienen nada que ver con la selección natural.
Yo diría que tradicionalmente el humano promedio no podía dedicarse tiempo completo a la actividad sexual.
* No hijo, la hipersexualidad es una alteración psicopatológica frecuentemente asociada a diversos cuadros psiquiátricos y neurológicos. En algunas ocasiones, se erige en el síntoma cardinal que presenta el paciente, adquiriendo por ello rango de trastorno mental.
Y la "selección natural" no tiene nada que ver en este asunto.
* Nosotros, hasta que los efectos del cambio climático dispongan lo contrario, no estamos en peligro de extinción, cuando eso ocurra los especímenes más activos sexualmente proliferarán, porque en salvaguarda de la especie, serán los más apetecidos. Por los momentos, dada la superpoblación de humanos, la selección natural más bien estará privilegiando a los hiposexuales.
El tema de la sexualidad es un tema complejo; desde que el tiempo es tiempo el hombre se comportó como monógamos (con algunas excepciones, por supuesto) tal vez pòrque siendo el hombre el más indefenso de los seres vivos desde que nace hasta que está en condiciones de manejarse solo, necesitaba de quién lo protegiera, le enseñara y lo cuidara. En las condiciones en que se vivía, la presencia del padre y de la madre era absolutamente necesaria, ya que el hombre proveía el alimento y la mujer cuidaba de la prole. Es indudable que si se fuera polígamo ese función sería más difícil de cumplir. Inclusive dentro de las especies animales se dan muchas donde una vez formada la pareja, ésta se mantiene toda la vida, como en el caso de los pingüinos. De manera que la hipersexualidad no siempre se da, y en el caso del hombre, si nos fijamos en lo sucedido a lo largo de la historia, nos damos cuenta que básicamente ha sido monógamo. Por supuesto que ciertas culturas han sido polígamas, e incluso dentro del Islamismo se acepta tener varias esposas,siempre que se las pueda mantener debidamente, se dice en el Corán. Pero es una cuestión cultural más que fisiológica. Para mi la evolución armó el esquema en defensa de la descendencia, buscando que se transmitieran los mejores genes, y la prole fuera protegida convenientemente, en pos de una continuidad de la especie.