El último canto
11 Feb, 2022
Tiempo de lectura aprox. :
6 min.
+4 votos

La empírica noche se puso su vestido

más oscuro, estrellas sin nombre se tiñieron de negra realidad.

El pasado cegándome, el presente contínuo asfixiándome por la ansiedad a la vez que mis latidos sostenían un pilar de pulsaciones.


La tristeza y fragilidad de unos inertes huesos confiaron en la dedicación del tallaje de un recipiente que captura órganos y piel, apresa arrugas de experiencia y la última fe de moribundos latidos sin corriente.


Vástagos sintieron gélido y sarcasmo frío de mármol, invadiendo huellas de plantas de pies caminando sobre un abismo, componiendo rabioso acantilado, ahogándose con gotas brotando de jóvenes estalactitas, inexpertas, con hambre de aprendizaje y alientos incautos ante un inesperado último suspiro.


Recuerdos de consejos, exhalando después de inhalar el humo de la última calada de un cigarro antes que una mirada corriese un telón después de un mentiroso Agosto, veinti nueve preguntas recíprocas de cruel realidad.


Preguntas sobre la muerte y la existencia, respuestas sobre la vida y la esencia en paradójica y fúnebre noche de verano.


Sintiendo arrugas en rostro prematuro, labios antes de cerrarse para siempre en sienes. Última respiración entre cuatro paredes invadiendo una muerte viviendo, una vida muriendo. 


Dilatadas y enrojecidas pupilas, impactaron en un purgatorio renegando del cielo, abrazando a un irónico frío infierno interno.


  • Encontré a un mirlo negro, por alas portaba guadañas, y por pico una lápida, intenté atraparlo, se giró, me miró, y no aguantó la mirada .
    Se perdió entre negras nubes volando hacia la crueldad y cantando a la realidad.
816 visitas
Valora la calidad de esta publicación
2 votos

Por favor, entra o regístrate para responder a esta publicación.

Adimvi es mejor en su app para Android e IOS.