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23 Dic, 2021
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Vaya edad a la que vine a para, desearía nunca más crecer, para ya no sentir todo este dolor y pesar que me rodea constantemente. 

Odio esto.

Odio mi vida.

Sinceramente a esta edad ya tengo plateado lo que voy a hacer a lo largo de mi vida y en parte no me gusta eso pero ya lo tengo todo trazado en está miserable cabeza, aunque algunas otras cosas no las tengo como un punto de meta ni referencia, son como cabos sueltos sin atar que todavía estoy buscando alguna respuesta o razón para llevarlas acabo o simplemente me da igual si las hago o no. Soy tan desinteresada en todo que a veces me sorprendo a mi misma trazando metas y puntos .
Una sorpresa tan desinteresada como las de mis padres al enterarse que me cortaba así que no me gusta en su mayoría dar paso a esa "sorpresa".

Desde muy pequeña fuí alguien que no le gustaba pensar en el futuro, pero eso también me llevo a la desgracia de siempre estar pensando en el pasado y nunca pensar en el presente por la misma razón siempre me encontré estancada en cualquier situación, veía a los demás seguir con su vida y yo solo me quedaba ahí viendo cómo los demás avanzaban en algo que yo no podía hacer o superar y ese es el mayor error que he cometido a lo largo de mi pequeña y miserable vida.

Hay tantas cosas que sigo sin entender del todo por lo cual no me considero una persona inteligente y mucho menos alguien con un léxico perfecto pero hago lo que puedo en estos relatos de la odiosa vida que llevo y que no sé si en algún momento se podrá mejorar aunque al paso que voy creo que nunca voy a poder estabilizarme y guiarme bien en este mundo de oscuridad y sin piedad en el que vivo.

Felicidad, hace mucho tiempo que no siento y veo ese sentimiento.

La felicidad, hay tantas situaciones que se pueden hacer para conseguir este sentimiento, es una palabra que tengo que fingir a diario por mi propio bien y el de los demás, ya olvidé que se siente estar muy feliz o emocionada, es como si toda emoción positiva se haya ido de este cuerpo y alma, ya no recuerdo cómo se sienten esos sentimientos y emociones, ya no recuerdo que se siente sonreír de verdad y no fingir, ya no recuerdo cómo es sentirse amada, solo recuerdo a lo lejos que era un sentimiento hermoso inigualable en su especie, pero ya no, ya no lo es y eso me amarga y negrea la vida y el alma.

Dedo decir que mi mente es un desastre de pensamientos y situaciones que a la larga dan riendas sueltas a todas estas sílabas y monosílabos que a veces me es difícil formar, todo esto solo se da paso mayormente en las madrugadas, por todo esto tengo un insomnio que no me deja tranquila sino desencadeno todo lo que llevo pensando en el día, por todo esto tengo unas ojeras que pareciera que estoy desayunado drogas en vez de un tazón de cereal, por todo esto es que mi cuerpo se mantiene tan adolorido y tenso al tacto y en el día se siente como si un camión de esos que llevan tierra me hubiera pasado encima y por todo esto es que mi cabeza está tan destrozada y quebrada, cada vez sale más y más mierda de esta mente y se quiebra un poco más y tengo la certeza de que algún día se va a quebrar completa y solo van a haber pedazos por recoger pero al final ya nada va a ser igual, todo esto va a quedar en el aire por el simple hecho que de donde salía toda esta basura de escritura está muerta, estaré muerta y todo esto va a quedar flotando en el aire sin dueño, esa es la certeza más grande que llegado a tener y fantaseado una y mil veces.

Cuando estoy deprimida, casi todo el tiempo lo estoy, y eso me está preocupando demás, si mis padres no se preocupan por mí no creo que yo lo haga por mi, lo único que hago es sentarme en la oscuridad de mi cuarto helado y escucho música por medio de mis audífonos a todo el volumen que se pueda, para no pensar y menos escuchar la vos de mi conciencia diciendo lo basura que soy en esta vida de mierda que me tocó vivir, diciendo que acabe con todo esto que cada vez llega más a su límite y no lo voy a poder para cuando todo se descontrole, toda esta situación se me está llendo de las manos, no puedo hacer nada al respecto, solo me acuesto en mi colchón lleno de agujeros y suciedad y trato de cerrar mis ojos para descansar un poco y más en el fondo deseando que deje de respirar durante la madrugada, que deje de vivir para no seguir sufriendo, pero siempre pasa cuando ya siento que me voy a ir de este mundo sucede que algo me despierta de imprevisto, es como que mi cerebro no quiera despegarse de este infernal mundo de locos y despiadados, me despierto con ojos llorosos y temblando y luego veo que estoy en el mismo lugar con el mismo cuerpo y lo más desagradable -Sigo respirando- susurro que todas las noches sale de esta boca asquerosa, y no puedo más que hacerme una bola humana debajo de las colchas hediondas para volver a conciliar el sueño y volver a desear que al siguiente día no me despierte.

Estaba dando vueltas en la cama y de pronto me quedé en la orilla viendo hacia nada pensando cuando por poco me caigo se sintió como si la muerte estuviera jalando de mí para que valla a su encuentro pero este cuerpo y cabeza no quieren y rápidamente me quite de la orilla, se siente como estuviera en un abismo, entre la vida y la muerte y de hecho lo es, entre la espada y la pared todo eso me hagobia a tal punto que ya no sé no que pensar, solo me quedó tirada como un saco de papas en la destartalada cama viendo hacia el techo que poco a poco se está demorando, solo estoy ahí sin pensar nada, solo viendo cada grieta y cada rincón lleno de suciedad que me revuelve el estómago pero mantengo la calma para no vomitar el último bocado que he probado en el día, es lo único que puedo hacer, resistir esas inmensas ganas de doblarme y comenzar a vomitar, vomitar hasta que salga mi corazón y pulmones por medio de mi boca, vomitar hasta mi cerebro para así no pensar, vomitar hasta el cansancio y así ya no sentir nada más que pesadez en el cuerpo y solo acurrucarme en el rincón más decente de mi cama y dormir, todo eso pasó en un abrir y cerrar de ojos, como hubiera querido que mi corazón haya salido para siempre, pero como siempre no se cumplió lo que desee en ese momento, al despertar me encontré en la misma situación, casi pero casi se podría decir que estaba muerta, pálida hasta la médula, una ojeras negras que me hacía parecer un zombi, sino fuera porque me dí cuenta que aún respiraba hubiera cantado victoria por haber cometido mi mayor deseo en esta vida, pero como no, entonces solo me levanté cuidadosamente y tan débil que casi me vuelvo a doblar a vomitar, esa fue la segunda vez que desee que mi corazón haya salido, ya terminada esa segunda vomitada como siempre salía de mi cuarto y solo se me quedaban viendo mientras me daba paso al baño a hacearme y como siempre nadie me preguntó porque vomite, nadie me ayudó a limpiar todo ese desastre, en fin estoy sola en este miserable mundo.

Me duele mi garganta por tanta arcada que he hecho en el día, no quiero salir de mi cuarto al parecer trajeron visitas y lo menos quiero hacer es ir a saludar, me quedo un rato sentada en la orilla de cama y parece que me duermo, eso está muy bien, me quita el malestar de mi garganta y la misma historia de siempre, despierto, maldigo, lloro, me levanto, vómito y otra vez a lo mismo, nunca lo voy a poder para.

Toda palabra que escucho y sea negativa me afecta en demasía es más hasta las positivas no tienen una buena reacción en mi, todo eso me hace pensar en demasía, y por todos esos pensamientos sale esta escritura que al final del día me hace reflexionar en lo más profundo de mi ser si está bien que me desahoque aquí o mejor me guardo todo y que nadie se entere por lo que estoy pasando. Sería lo mejor así dejo de hacer este gran ridiculo que siempre hago.

Lo que más he odiado desde que tengo memoria es que me interrumpan, admito que tengo una gran obsesión por la música y no digo de todo tipo porque no me gusta el reggaeton y la bachata ni mucho menos la cumbia o el reggae ese tipo de música queda para otro tipo de persona, esa música no me hace indentificarme con nada y prefiero no hacer ningún comentario, ante todo el respeto, respeto y respeto es lo que he pedido por casi 9 años y nunca he obtenido aunque sea una mínima de este, continuando con el odio, tengo una gran obsesión y necesidad de la música, no puedo dejar de escuchar, me agobia solo de pensar que algún día me quitarán la música, me lleno de rabia cuando estoy escuchando música a todo volumen y a alguien insignificante osa perturbar mi conciencia y pacifidad que el mundo de la música me otorga, me enferma el hecho de que cada vez que me coloco los audífonos alguien podrido venga y me hable por cualquier tontería, me dan ganas de zamparles un muy buen puñetazo a todo aquellos que se acercaron con la intención de hablar y que yo dejara de escuchar mi preciada música. Me enferma en demasía. Por eso amo más escucharla en las noches y madrugas que a esa hora ni una mosca me molesta solo está molesta vocecilla dentro de mi cabeza pero por suerte la apago con el volumen de la música.

Ahora estoy tan ida que me cuesta mostrar alguna emoción en mi rostro, estoy en blanco la gente se me queda viendo y no se quemas darles que mi mirada que desde pequeña a sido tan dura, fría y distante, las personas solo apartan la mirada, piensan que estoy enojada, si supieran que cuando me enojo parezco otra persona, mi rostro está en blanco, tan pálido que parece que no tengo sangre, mi mirada aunque café oscuro parece que con cada paso que doy se vuelve negra y asusta, ya lo he visto en los ojos de la gente, una pudiente y simple niña comenzó a llorar solo porque la voltie a ver, he asustado con mi mirada a las personas, mis manos casi moradas combinadas con un blanco opaco ya no parecen manos están tan frías que parecen congeladas del todo, ya nada es igual en mi, cambie, pero cambie para mal, ya no soy la misma de antes, siento que he llegado a mi límite de años.

Ya he llegado hasta aquí y no se que hacer con mi vida, ya no le veo el sentido a la vida como antes.


Me quiero ir.

Me voy

Adiós.
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