UN SELAH MEDITABUNDO, Salmos 9:13-16

Ten misericordia de mí, Jehová;
Mira mi aflicción que padezco
a causa de los que me aborrecen,
Tú que me levantas
de las puertas de la muerte,
Para que cuente yo todas tus alabanzas
En las puertas de la hija de Sion,
Y me goce en tu salvación.
Se hundieron las naciones
en el hoyo que hicieron;
En la red que escondieron
fue tomado su pie. Jehová se ha hecho conocer en el juicio que ejecutó;
En la obra de sus manos fue enlazado
el malo .
Higaion.
Selah
Salmos 9:13-16

REFLEXIÓN:

Selah... Y toda la alabanza por los juicios de Dios y el establecimiento del Reino Eterno, reserva un espacio de meditación personal donde no faltan tribulación, rescate, victoria y juicio.

La existencia del impío es causa inevitable de la aflicción del justo, más aún ya que la carga y opresión se dirigen directamente sobre su persona.

Pero hay algo peor que la obra del impío, y eso es la muerte.

De manera que, siendo librado de la muerte, no hay impío que pueda eclipsar ese gran motivo de alabanza.

Selah... Y David toma fuerza en su pequeña estrofa de meditación personal...No hay motivo más real y contundente que la Soberanía de Dios para eclipsar toda aflicción humana.

APLICACIÓN:

Sin duda, no puede haber victoria sin antes haber lucha, y no puede haber lucha sin sufrimiento.

Pero Dios nos da la victoria desde antes de empezar la lucha y, aún en medio de las aflicciones, somos librados de muerte, motivo más que de sobras para redirigir nuestros pensamientos de lamento a alabanza.

Dios nos ha provisto del rescate eterno en Su Hijo el Señor Jesucristo, quien hizo suyo todo el peso del pecado, venciendo así a la muerte tras su paso por la cruz su resurrección y su ascensión a la diestra del Padre.

No puede haber mayor motivo de alabanza que este, y cómo todo el peso de la Justicia Divina aplastará definitivamente al malo.

Cómo no, recordar que Dios es Soberano, nada puede suceder o prevalecer sin Su permiso, sea bueno o malo. Así que, aún mientras exista la maldad sobre la Tierra, prevalece la misericordia de Dios, en espera de que todos procedamos al arrepentimiento.

ACCIÓN:

Meditando en la índole de los contratiempos que me pueden surgir, de los males que me acechan, del impío que me atosiga con sus maldades para que mi paz se pierda...

Me viene a la mente esta reseña:

Bueno me es haber sido humillado,
Para que aprenda tus estatutos.
Salmos 119:71

Y he de reconocer que, en mi terquedad, jamás habría acudido al Rescatador sin haber necesidad de ello.

De manera que el pecado y la muerte entraron al mundo por un hombre, un Hombre se ha hecho cargo de ello, trayéndome vida, ¡ y vida en abundancia!

Mayor motivo que éste para alabarle, aún en medio de la prueba, no lo hay.

Me acerco a Ti y humillo mi corazón y mi persona, sabiendo que Eres la razón de mi existir, el que tiene el dominio sobre la vida y la muerte y el que me permite un día más para llevar Tu nombre y mostrar a Cristo a quienes aún se ven atrapados en los lazos de la muerte.

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