No hay caminos que no haya cruzado por ir a verte
Musa de mis encantos, poeta de mil versos
De los acordes melodiosos de la tarde
De la luna, de los soles y días muertos.
Me recuerdas el atardecer en esta playa
Donde diligente enamorado un día vine a buscarte
Un domingo por la tarde te quedaste
A disfrutar del sol envolvente de estos lados.
Dime ahora dónde andas en este tonto invierno
Que me moja los zapatos y hasta el alma
Dónde estás que ya no compongo versos
Por faltarme mi musa encadenada.
También siento la alegría de un baile
Que comienza al son de los tambores
Baila cuerpo, muévete en silencio
Conquistemos esta noche los amores.
Sé también que me has buscado en otros rostros
Éste inmenso mar hoy nos separa
Dime si el mundo se acabase en este instante
Dónde quieres que repose eternamente tu mirada.
