ABRIL 21
Nada llega a nuestra vida por casualidad, también creo que cuando se va lo hace por el mismo motivo. Ahí es cuando también hay que agradecer.
Es simpre si pasa, y es para bien, se quedará; si sigue de largo es que no tenía que ser para mí .Así aprendí a soltar y a dejar fluir.
Cuantas veces nos enojamos cuando no pasa algo, nos sentimos resentidos con todo, ya sea algo o alguien, puede ser que queramos a alguien pero esa persona no corresponda a nuestros sentimientos, nos ponemos tristes o enojados y nos preguntamos por qué pasó eso, que hicimos mal, que nos hace falta.
La verdadera respuesta es que nosotros no somos el problema, ellos tampoco, sólo que no era para nosotros, así de sencillo. Si algo no pasa es por algo, todo pasa por algo, alguna vez nos habrá pasado eso de entender algo que pasó y decimos "que suerte que no pasó" o "había sido era por esto que no pasó lo otro". La vida nos está guardando algo para nosotros, algo bueno y mejor de lo que queremos ahora o queríamos anteriormente.
Tengo una experiencia con eso que me gustaría contar; yo iba a un curso donde preparaban a estudiantes para ingresar a una universidad nacional, el ingreso era súper difícil y más en la carrera en la que yo quería ingresar, pero era gratis una vez que estabas dentro, lo otro lo tenias que pagar todo, tanto el curso a donde yo iba y un curso que más adelante iba a ir.
La vida que tuve durante ese proceso fue lo peor que me pudo pasar, estuve como 3 meses en ese lugar y literal todos los días me la pasaba llorando por el estrés, la ansiedad y las noches sin dormir que me provocaba porque no entendía mis clases y mi profesor no era tan amable que digamos.
Mi mamá ya estaba preocupada por mi porque ya no comía, estaba adelgazando como nunca y obviamente porque estaba al borde de entrar en una depresión. Entonces me enfermé, tuve dengue no se si lo conocen, les juro que me alegré por enfermarme jaja pero a la vez estaba triste porque no sabia que iba a hacer con las clases que iba a perder.
Entonces ese día que enfermé mi mamá decidió mandarme a una universidad privada, hicimos muchos trámites, luego la abracé y lloré tanto pero de la felicidad, quizás piensen que soy una drámatica pero yo sé lo que viví en ese lugar.
Y ahí me di cuenta, que yo tenía que sufrir para valorar esto que estoy haciendo ahora, mi mamá siempre me decía que por algo yo no lograba encajar en ese lugar y era porque yo debía estar en otro y agradezco a la vez esa experiencia porque ya no está, por algo pasé por todo eso.
Estoy muy ajetreada ahora espero les haya gustado y servido mi experiencia, les deseo un feliz martes, cuidense. Los quiero.
c out.
