Querida Virginidad
Heme aquí, escribiéndote nuevamente con letras de dolor. Y con rabia emanando de mi estómago .Yo pensé que de verdad iba a ser especial. Como todas, que te perdería con dignidad, furor y con un adiós lleno de amor y nostalgia. Pero te perdí con lágrimas y no te quería dejar ir. Pero cuando desperté ya te habías ido y era tarde. Te soltaste de mis brazos y me dejaste desolada y sin fe. Por qué perdí la fe. Perdí la esperanza que había acumulado todo ese largo tiempo cuando hablábamos juntas y imaginabas la mejor forma de despedirnos. Y cuando te perdí, te perdí de la manera que menos imaginaba. De la manera más terrorífica y frívola.
Y ahora ya no puedo hacer nada. Solo continuar extrañando las pláticas de noche contigo y las veces que me acompañabas en mis desvelos.
Donde quiera que estés. Acuérdate de mí y de que aún te quiero, y que no te quiero dejar ir. Vuelve por favor si puedes, aunque sé que no, aún así; inténtalo. Cada vez que pienso en ti mis lágrimas salen sin permiso. Siento un nudo en la garganta y tengo ganas de volver a nacer, solo para poder verte de nuevo.
Si hay algo que puedas hacer por volver. Házlo, vuelve y tráeme flores, por qué todas las demás están marchitas.
Querida, con falsas esperanzas te espero.
Si, te esperaré.
ig: @maileeanabellamakeup