Y te fuiste...
Cuando partiste, te llevaste, cada célula de mi corazón, cada fibra y filamento, ese conjunto de tejidos, que solo latían por ti, porque cuando te marchaste, se fueron contigo mis ganas, esas de amar, de perdurar, y de procurar a una persona por encima, inclusive de mi mismo, te fuiste, arrastrando contigo un pedazo de mi ser; mi compromiso, mi amor, y mi cariño, siempre te seguirán, como la luna y el mar, moviéndose uno por el otro, pero destinados a nunca estar juntos, te fuiste, decidiste alejarte, y yo decidí dejarte partir. Hay amores que se clavan más allá del corazón, porqué, aún cuando te lo llevaste, te siento en mi alma, y en cada neurona de mi cerebro, partiste, no te perdí, no me perdiste, sólo te fuiste.. .